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Cómo resolvemos conflictos de forma pacífica en nuestras aulas y cómo también podemos ponerlo practicar en nuestras familias

DM Feb 19

Los niños se enfadan, se sienten frustrados y se irritan. Es normal. Aún son pequeños y las zonas del cerebro encargadas de la regulación emocional no se han desarrollado lo suficiente. También es usual que peleen con sus hermanos y surjan conflictos.

Por ello, si buscas alguna alternativa respetuosa para todos y que ayude a niños y adultos a relajarse para encontrar soluciones de manera eficaz, te contamos cómo aplicar dos ideas parecidas aunque no iguales y a veces una mezcla de ambas o una adaptación de ambas, puede valer para solucionar problemas y “bajar decibeles” en el momento del conflicto. Nos referimos a “el tiempo fuera positivo“; una genial herramienta de la Disciplina Positiva y a la “mesa de paz” siguiendo el método Montessori.

Aquí te explicaremos brevemente cómo funciona cada uno:

TIEMPO FUERA POSTIVO: ¿En qué consiste?

Propone que adultos y niños se tomen un tiempo respetuoso de desconexión y reflexión, para que desde la calma y la racionalidad encuentren soluciones a un determinado problema. Nos ofrece una alternativa respetuosa, firme y gentil a la hora de educar a nuestros hijos. En definitiva, el “tiempo fuera positivo” es un espacio de calma, seguridad y escucha activa, y nunca un sitio donde sermonear, gritar o juzgar. El objetivo es tranquilizarnos para poder actuar de forma racional, y buscar soluciones de manera respetuosa.

Si quieres ponerlo en práctica, aquí van algunos pasos a seguir:

  • Antes de comenzar a aplicar el “tiempo fuera positivo” debemos informar a nuestros hijos de su propósito y de lo mucho que puede ayudarnos a la hora de relajarnos cuando más lo necesitemos. Además, estableceremos pautas para utilizarlo de manera adecuada.
  • Deberemos elegir un rincón acogedor en la casa o en el aula para este fin. También podemos crearlo y decorarlo con elementos que nos aporten calma y felicidad (cuentos, música relajante, cojines o almohadas, pelota antiestrés, muñeco de apego…).
  • A este rincón nos retiraremos voluntariamente cuando necesitemos relajarnos y tomar distancia del problema para encontrar una solución. El matiz “voluntariamente” es muy importante, ya que jamás se debe obligar al niño a ello, aunque sí podemos sugerírselo Es importante que los niños pequeños siempre permanezcan acompañados de un adulto mientras están relajándose en este rincón
  • Una vez que el niño haya aprendido a utilizar este espacio respetuoso y sea consciente de los beneficios que le aporta, probablemente recurra a él de manera voluntaria cuando lo necesite, aunque debemos estar dispuestos a acompañarle si así lo demanda.

¿Qué es la MESA DE LA PAZ?

Siguiendo la Pedagogía Montessori, la mesa de la paz es una técnica para ayudar a los niños a resolver los conflictos antes de que las emociones se desboquen. Puede utilizarse para conflictos con otros niños o para momentos de conflicto interior. Si el niño se siente nervioso, enfadado o frustrado, puede utilizar la mesa de la paz como un refugio para identificar cómo se siente y calmarse.

Se trata de una mesa pequeña con sillas para cada uno de los niños, encima de la cual se deben colocar algunos elementos, cada uno con una función diferente:

  • Reloj de arena de al menos un minuto de duración, de manera que los niños se relajen mientras ven caer los granos de arena. Además, lo usarán como indicador para ceder el turno de la palabra al otro.
  • Un objeto relajante, como una pelota antiestrés.
  • Una campana o timbre, que los niños sonarán cuando resuelvan el conflicto.
  • Otra alternativa más interesante es el palo de lluvia, un tubo largo relleno de semillas que imita el sonido del agua al caer y que también tiene una función relajante puesto que demanda movimientos lentos y pausados.

Ante todo, es importante que el niño no se sienta forzado a sentarse a la Mesa de la Paz ya que la percibirá como un castigo y, en vez de relajarse, es probable que termine más enfadado y frustrado.

Estas dos maneras de autorregulación, tanto para niños pequeños como para mayores, son estrategias que funcionan a medida que los niños se van haciendo con ellas, quiero decir que es una cuestión de trabajarlo tanto en casa como en los colegios para fomentar la resolución de conflictos internos o externos de una forma civilizada, pensada y pacífica.

Ana Lozano Iglesias
Sandra Lea Schuchner

Ana Lozano Iglesias y Sandra Lea Schuchner
Certificadas en Disciplina Positiva

Certificadas en Disciplina Positiva y creadoras de Enfocando en Positivo. Brindamos apoyo y recursos de crianza respetuosa a familias, educadores e instituciones educativas. Con nuestras cursos y talleres podrás descubrir una forma de educar diferente, basada en descubrir una Gran Caja de Nuevas herramientas que se apoyan en los principios de la teoría Adleriana.
Nuestro objetivo es ofrecer un método de crianza basado en relaciones de respeto y confianza en niños y adultos, con el propósito de formar sociedades libres de violencia compuestas por personas felices con sentido de comunidad.
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