Entrevista a MARIO CRESPO LÓPEZ, Director del CEPA “ESCUELAS VERDES” de Santander
¿Cuál es la oferta educativa del CEPA “Escuelas Verdes”?
El CEPA ofrece diferentes opciones para quien cree que no las tiene. Ofrecemos en horario de mañana y tarde la enseñanza cuatrimestral de Educación Secundaria para Personas Adultas, que culmina con la obtención del graduado en ESO. Asimismo, preparamos las pruebas libres para la obtención del graduado, que se convocan habitualmente para los meses de febrero y junio. Otra oferta esencial en el CEPA es la Formación Básica Inicial. Además, se ofrece la posibilidad de cursar por la mañana el acceso directo a Grado Medio, enseñanza anual en la que nuestro centro ha sido pionero, dentro de una experiencia piloto de la Consejería iniciada en el curso 2016/17. Asimismo, puede cursarse la preparación de las pruebas de acceso al Grado Superior y a la Universidad de Cantabria para mayores de 25 y 45 años, en cursos anuales que se estructuran en una parte común y varias asignaturas específicas. La oferta se enriquece con una amplia programación de talleres y enseñanzas no regladas, que incluyen, entre otros, cursos de Inglés y Francés, Español como lengua extranjera, Patrimonio y Arte.
¿Cómo es el alumnado del CEPA?
Al centro acude un alumnado muy diverso que responde a muy diferentes perfiles. En general es un alumnado motivado, que valora positivamente su asistencia a las clases. Hay jóvenes, hasta 25 años, aproximadamente, que desean obtener el graduado en ESO para continuar su formación o mejorar su cualificación laboral o que desean acceder a ciclo formativo de Grado Medio o preparar la prueba de acceso a Grado Superior. Otros alumnos, de cualquier edad adulta, que, por diversas situaciones, pretenden obtener el graduado o una cualificación complementaria, que buscan aumentar su cultura y poder relacionarse con otros adultos en un marco de aprendizaje o que tienen necesidad de alfabetizarse. Un porcentaje amplio de alumnado es extranjero, que necesita aprender el idioma desde muy distintas situaciones personales y profesionales.
¿Es diferente la metodología en las clases de adultos?
En realidad, toda metodología en los distintos niveles educativos es diferente, o debería serlo, en cuanto a la adaptación al alumnado. El de adultos es muy variado y suele tener un amplio bagaje de experiencias habitualmente no académicas que hay que aprovechar. También hay que tener en cuenta su situación personal y tratar de potenciar sus posibilidades, que no piense en imposibles, sino en las posibilidades reales de su aprendizaje. El docente debe valorar lo que al adulto a veces le cuesta venir a clase y compaginar su tiempo con otras obligaciones familiares y laborales.
¿Qué planes específicos desarrolla el centro?
Tenemos planes que, con la necesaria adaptación a nuestro contexto, son comunes a otros centros, como los planes TIC, de interculturalidad o de igualdad entre mujeres y hombres. Este curso la Consejería nos ha valorado como proyecto de innovación el plan lingüístico de centro, que trata de articular diversas actuaciones en torno a la diversidad lingüística que nos enriquece. Tengamos en cuenta que el curso pasado teníamos alumnos de 26 nacionalidades en las enseñanzas regladas (un 40% de nuestros alumnos eran extranjeros) y de 45 nacionalidades distintas, de los cinco continentes, en Español como Lengua Extranjera. Llevamos un tiempo tratando de participar en algún programa europeo Erasmus+ que contribuya a la mejora del centro. También nos preocupa la innovación docente, sobre todo a través de las nuevas tecnologías y los recursos digitales. Tenemos una revista digital, Anaquel, y estamos mejorando nuestra presencia en redes sociales y la difusión a través de los medios.
¿Con qué entidades tiene relación el CEPA?
Trabajamos con distintas entidades a muy diferentes niveles. Para una buena atención al alumnado es necesaria la colaboración con entidades con las que estos tienen relación. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que tenemos algunos alumnos menores. Pero en el aprendizaje a lo largo de la vida están implicadas muchas entidades y tratamos de facilitar la conexión para un mejor conocimiento de la realidad. Además de la atención al alumnado, la organización de actividades culturales es más rica y variada si contamos con distintas colaboraciones, que siempre agradecemos mucho. Entre otras entidades sociales y educativas, el CEPA colabora con la Universidad de Cantabria en la formación del profesorado.
El CEPA cambió de nombre el pasado curso, ¿a qué fue debido?
En realidad, no es que cambiara de nombre, sino que se puso como oficial el nombre con que era popularmente conocido, “Escuelas Verdes”. La modificación fue aceptada por mayoría absoluta en todos los órganos colegiados del centro. Antes que cualquier otro nombre, sin duda es preferible el más popular e histórico. Además con ello se acentúa el origen de la entidad educativa: un edificio escolar pintado de verde, como eran los creados durante la II República. Es una muestra de respeto a su historia.
¿Qué relación tiene el CEPA con el entorno más cercano?
En junio de 2017 la Asociación Vecinal Río de la Pila-Los Aguayos-San Antón nos concedió “La Pila de Honor” y lo hicieron, leo textualmente, “en reconocimiento a su ejemplar labor a lo largo de los años, a favor del desarrollo personal y social de niños y mayores, históricamente ligada al barrio”. Queremos mantener y potenciar esa vocación de implicación en la vida del barrio, a través de la oferta educativa, desde luego, pero también a través de la programación de actividades culturales y la biblioteca del centro.
¿Cómo fue la donación al CEPA, por parte de Mario Camus, de su biblioteca particular?
Mario Camus conocía el centro y además tenía amistad con varios miembros del claustro. Decidió donar su biblioteca en atención a la vocación social de la institución y al hecho de que nuestra biblioteca sea abierta al público. Sus libros están en una sala aparte, preservando su entidad como la importante biblioteca particular que ha sido, pero su acceso es público.
¿Cómo es la implicación del CEPA en la vida cultural de la ciudad?
Planteamos cada curso un conjunto de actividades culturales abiertas al público, sobre todo conferencias y exposiciones. Ahora mismo, hasta el 28 de febrero, tenemos una exposición creo que importante, en colaboración con la Fundación Telefónica de Madrid, titulada “De España a la Luna”, sobre la participación española en el Programa Apolo de la NASA. Algunas de estas exposiciones, como las que hicimos del Beato de Liébana o del patrimonio rupestre de la Cornisa Cantábrica, se han movido a otros centros educativos. Hemos hecho además estos últimos años varios homenajes a artistas cántabros, como Ramón Calderón, Enrique Gran e Isaac Cuende, y hemos homenajeado al grupo Peonza, además de ofrecer recitales poéticos, encuentros con escritores, charlas de divulgación científica, etc.
¿Cuáles son los retos más importantes en la educación de adultos?
Esta pregunta la tenemos que contestar todos los agentes implicados en la educación de adultos o el “aprendizaje a lo largo de la vida”. En realidad, esto es un objetivo universal y, desde luego, europeo: la formación no se acaba nunca, es constante y se escribe en muy diferentes direcciones. Creo que es necesario mantener la oferta formal relacionada con la Educación Secundaria Obligatoria, pero flexibilizar el resto de la oferta educativa, tanto de accesos a otras enseñanzas como la no reglada, vinculada a programas académicos de muy variada índole. El mundo cambia a ritmo vertiginoso, todos debemos estar en continua formación. Un reto es sin duda la alfabetización mediática, pero también la extensión de la cultura y el conocimiento. Otro reto creo que fundamental, y aquí deben intervenir los gestores políticos, es la comunicación con Empleo, para ofrecer al ciudadano opciones reales y cualificadas para su mejora académica y profesional.