Preescolares en casa durante la cuarentena por el Coronavirus
Una cosa positiva de la cuarentena es que estoy teniendo tiempo para releer viejas notas y visitar la pila de libros que una vez puse a un lado para leer. Aquí va una recopilación de algunas de las ideas y recursos que encontré. He elegido tres ideas básicas para recordar en estos días de confinamiento con los más pequeños.
¡Ejercicio, alimentos saludables y disfrute!
La actividad física es importante para desarrollar habilidades motoras finas y gruesas, equilibrio, control y coordinación del movimiento. El ejercicio también mejora las funciones cognitivas y ejecutivas del cerebro.
El período desde el nacimiento hasta los seis años es cuando se forman hábitos que se convierten en la personalidad. Dar a los niños la oportunidad de hacer mucho ejercicio a esta edad creará hábitos saludables para toda la vida.
El tiempo dedicado a mirar la televisión, videos, a usar un iPad o un ordenador, además del peligro de alterar la capacidad del cerebro para enfocarse o concentrarse, fomenta un estilo de vida sedentario, en lugar de activo.
Durante la cuarentena por Coronavirus, los padres se verán tentados a entregar un iPhone o iPad o similar. Esto es comprensible, pero recordemos que cuanto más pequeño es el niño, peor es para su lenguaje y desarrollo cognitivo. Como alternativas, para alentar el movimiento y evitar las pantallas, algo tan simple como bolas suaves o pequeñas y un balde para lanzarlas dentro, un libro de posturas de yoga o música para bailar, puede brindar grandes oportunidades para hacer ejercicio en casa.
Fomentemos una alimentación saludable invitando a los niños a que ayuden a preparar la comida y poniendo a su alcance alimentos saludables para cuando tengan hambre.
Involucremos a los niños en aspectos de la planificación de comidas y la preparación de alimentos. Es mucho más probable que los niños coman alimentos que ellos mismos ayudan a elegir y preparar. A los niños pequeños se les puede dar dos opciones: “¿Servimos zanahorias o guisantes esta noche para la cena? Puedes elegir”. Los niños mayores pueden participar en la planificación de los menús.
Recuerda que los niños tienen que probar un alimento varias veces para que les guste y es posible que no disfruten de ciertas texturas o sabores. No te desanimes y sigue dándoles la oportunidad de probarlos.
Evita luchas de poder innecesarias
Evita las luchas de poder absteniéndote de pedirle constantemente a tu hijo que coma. Enfócate en la selección de alimentos, en practicar modales, en participar en la conversación, no en suplicar a tu hijo para que coma más verduras. ¡En la mesa, mantén conversaciones, no interrogatorios!
Proporciona al menos una o dos comidas que generalmente tus hijos disfrutan. Si tu hijo elige no comer una cosa, no te preocupes. Permíteles elegir entre las diversas opciones de alimentos saludables que has colocado en la mesa.
En lugar de “negociar” con tus hijos qué y cuánto comer, ¿no sería más fácil proporcionar una variedad de alimentos saludables en la mesa y dejar que tomen sus propias decisiones?
Tómate un minuto para reflexionar. Imagina que estás en un restaurante frente a tu plato. Imagina que pediste verduras. Cuando llega tu comida, ves que también han incluido unas patatas fritas de bolsa como “guarnición”. ¿Qué es lo primero que te sentirías tentado a comer? ¿Cuánta autodisciplina y autocontrol necesitarás para optar primero por la opción saludable? ¿Estaremos pidiendo a nuestros hijos pequeños que hagan algo que los adultos, con un cerebro completamente maduro, no pueden hacer?
División de Responsabilidades, segúnEllyn Satter
Rol de los padres:
Proporcionar la estructura de la comida – Determinar los alimentos que se servirán – Establecer los horarios de comidas y refrigerios – Eliminar las distracciones durante las comidas – Hacer que las comidas sean agradables – Modelar buenos hábitos y modales
Rol de los niños:
Tomar sus propias decisiones – Elegir lo que van a comer – Decidir cuánto comen – Decidir si comen o no
¡Disfruta!
Parece lógico pensar, como apuntan muchos estudios, que los niños que se sienten felices, seguros y amados tienen niveles más altos de función cerebral. Incluso como adultos, nuestros cerebros completamente desarrollados funcionan peor cuando nos sentimos estresados o ansiosos.
Los estudios también revelan la importancia del juego en el desarrollo del cerebro. Los niños usan el juego para reforzar y explorar su comprensión del mundo, reforzando las cosas que aprenden en el hogar y en la escuela.
Crear su propio juego, en lugar de depender de juguetes que esencialmente juegan para ellos, les permite a los niños explorar la expresión creativa. La inteligencia se basa parcialmente en la capacidad de resolver problemas, a menudo nos obliga a “pensar fuera de la caja”. Cuando los niños participan en juegos imaginativos, lo que puede parecer absurdo o aleatorio para nosotros, es en realidad una forma de explorar su mundo conocido y desarrollar la capacidad de crear sus propias soluciones a dilemas reales e imaginarios.
Para hacerlo con éxito, los niños necesitan una experiencia concreta con objetos reales y consecuencias naturales (si empujo esto, se cae; si lo dejo ir, se cae, etc.) para sentar las bases para la creación de su imaginación.
Usa objetos reales y materiales manuales en casa, tanto como sea posible!
Por esta razón, en las escuelas Montessori se usan objetos reales, incluidos materiales para preparar alimentos reales, herramientas como destornilladores y tornillos, y materiales manuales para explorar desde la geografía hasta la geometría. Incluso jugar con juguetes como muñecas y figuras les da a los niños la oportunidad de explorar y practicar las relaciones sociales y mejorar su comprensión del mundo real.
Confía en tu hijo y confía en tí mismo
Como padres, quieres a tu hijo de una manera que nadie más puede. Y ese amor incondicional es exactamente lo que tu hijo necesita más que cualquier otra cosa. Diviértete con ellos, no te preocupes ni te juzgues demasiado, y disfruta de los preciosos momentos que compartes con ellos. Compartir amor y experiencias alegres con tu hijo pequeño puede no parecer una preparación para la universidad o una carrera profesional, pero estarás construyendo su confianza en sí mismo y mejorar la capacidad de funcionamiento de su cerebro. Lo académico puede esperar. La cuarentena pasará, y también el tiempo que tienes para pasar con tus hijos pequeños. ¡Disfrútalo!
Educadora del programa de Disciplina Positiva para padres y en el aula. Formada por Jane Nelsen. USA
Recursos:
https://disciplinapositivaespana.com
