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“El aprendizaje vivencial supera cualquier programa educativo”

DM Abr 27

Nahúm Cobo Del Barrio es maestro y director del CEIP Costa Quebrada, Soto de La Marina, Cantabria. Compagina esta profesión con otras tres pasiones, la música, la escritura y el arte de contar cuentos.

¿Qué es el aprendizaje vivencial?

Es el aprendizaje que tiene lugar en un contexto real, por ejemplo gestionar un huerto escolar o planificar un mercadillo solidario. Situaciones del día a día que permiten llevar a cabo los aprendizajes que se establecen en los sistemas educativos. 

Engloba diferentes disciplinas y destrezas como matemáticas, de razonamiento, de comunicación, hace falta movimiento, acción y un importante componente emocional.

¿Cómo podrías transmitir a las familias los beneficios de este tipo de aprendizaje?

El aprendizaje vivencial es el aprendizaje de la vida. La vida excede el curriculum, es muchísimo más amplia. Se centra en el saber hacer, el saber aplicar tus conocimientos, en utilizar tus destrezas para resolver situaciones. Por esto mismo el aprendizaje vivencial supera cualquier programa educativo.

Hay que considerar los miedos que pueden tener las familias y los propios docentes a que un niño o una niña no aprenda dentro de un determinado tipo de aprendizaje que abarca tanto, que se enfrenta a algo no tan estructurado desde un punto de vista externo. Pero la experiencia y los resultados confirman que este tipo de aprendizajes realmente es el que otorga los conocimientos funcionales para desenvolverse en situaciones reales.

¿Es posible llevar este planteamiento a la práctica del día a día del aula?

El aprendizaje vivencial es un tipo de planteamiento que se pone en práctica en distintos centros educativos de toda índole. Un ejemplo de ello es nuestro centro, pero hay muchos otros. Es posible traer la vida real a un centro pero es necesario hacer ciertos cambios y un compromiso de todo el equipo, preparar espacios para que esas situaciones reales puedan tener lugar, contar con una dotación de recursos adecuada,…

¿Podrías explicarnos como se puede llevar a la práctica este tipo de aprendizaje?

El modelo de la escuela desde mi punto de vista debería haber cambiado hace mucho tiempo. La escuela tradicional no acaba de dar respuesta a las necesidades del desarrollo infantil.

La escuela debe cambiar su modelo pedagógico para acompañar a los niños y niñas en un tipo de aprendizaje que les prepare para la vida de la que ya están participando y para el futuro.

Otro de los asuntos que debemos plantearnos es cuál es la institución que puede educar a un niño o una niña.  Un centro educativo no es el único lugar donde un aprendizaje vivencial puede tener lugar. Existen modelos de comunidades de aprendizaje en los que se observa a la institución como un lugar de encuentro donde vivir experiencias de aprendizaje y crecimiento.

¿Consideras imprescindible una continuidad en la etapa secundaria de esta práctica educativa?

 La coherencia es esencial, debemos atender a las distintas etapas del desarrollo infantil y juvenil a lo largo de todo el sistema educativo. La educación secundaria tanto como la primaria deben tener en cuenta la demanda social de búsqueda de un ciudadano que se enfrente a los problemas de manera creativa, con sus emociones bien gestionadas y que ofrezcan soluciones a las situaciones que el mundo actual presenta.

Para ello es necesaria la comunicación entre los equipos de todas las etapas.

¿Como director con qué dificultades te encuentras en el día a día para poder llevar a cabo este proyecto en el centro?

Es justo decir que yo como director no llevó a cabo el proyecto, somos un equipo de treinta personas que formamos el equipo docente y realmente es la base para que un proyecto camine. La primera dificultad es que ese equipo funcione y sea la voz de todos. Como director puedo marcar la línea de trabajo pero todo el equipo es realmente la gasolina de este proyecto. 

Por otro lado hay mucho conocimiento sobre el desarrollo infantil y la educación, pero falta conocimiento dinámico, no hemos dado el paso para poner en práctica ese proyecto educativo basado en la ciencia y en la experiencia.

¿Podrías explicarnos cómo se lleva a la práctica la evaluación de este modelo?

Intentemos dejar de lado la evaluación de lo que los niños y niñas saben. Lo que realmente les va a dar herramientas para ser ciudadanos participativos y protagonistas de su propia vida va a ser lo que saben hacer, a lo que saben enfrentarse, lo que saben resolver.

Pienso que las notas, realmente son para los docentes únicamente, porque tenemos que ofrecer una educación de calidad y favorecer la atención a la diversidad de todo el alumnado. Creo que todas las notas que podamos poner son las notas que nos ponemos a nosotros mismos como docentes. 

La evaluación de un aprendizaje vivencial puede llegar a ser complicada porque el componente emocional de este tipo de aprendizajes es básico, tenemos que proporcionar al alumnado el alimento para que ellos hagan la digestión, los espacios educativos para que ellos jueguen enfrentándose a situaciones reales. Esos espacios, recursos y situaciones tienen que estar conectadas con la emoción de los niños y las niñas, lo que ellos realmente quieren hacer y ser. De este modo conseguiremos aprendizajes significativos para toda la vida.